La larga y excepcional época de aislamiento que vivimos sirvió para hacer una introspección, para asentar algunas ideas y cambiar el estatus quo de nuestras vidas. En este sentido, algunos artistas aprovecharon para crear, para sacar a la luz ciertos sentimientos que de otro modo hubiera sido un tanto más difícil hacerlo.
Dani Bander tomó esta temporada de encierro para componer y producir su nuevo material discográfico, Melancoholismo, ya disponible en plataformas digitales. Un álbum bajo la bandera del hazlo tu mismo, que plasma su sentir durante ésta época y quizás algunas otras experiencias previas.
La noche del martes 26 de octubre, fuimos testigos presenciales de estas reflexivas melodías gracias a su concierto en el Foro Indie Rocks, dentro de la serie de showcases que el inmueble de la colonia Roma arma cada semana. Y créanme, ver el regreso de Bander a los escenarios luego de tres años sin pisar uno de ellos, fue una experiencia satisfactoria.
Es muy reconfortante llegar al Indie Rocks y ver cómo ha cambiado luego de este periodo sin visitarlo. Personal amable, instalaciones limpias y con varias medidas sanitarias para nuestra seguridad. Además, la entrada ahora es un escaparate de mercancía del acto del momento y algunos otros recuerdos.
El patio trasero se convirtió en el lugar donde puedes degustar comida de Stoner Rex BBQ mientras ves los conciertos en su escenario al aire libre, con platillos bastante deliciosos y una amplia carta de bebidas con y sin alcohol. Algunas mesas para grupos grandes y otras para parejas o corazones solitarios. Ahí es donde esperamos pacientemente a los músicos.
El acto abridor corrió a cargo de Anthony Escandón, un compositor originario de Chihuahua y radicado en CDMX, que a través de su música nos expresa diversas reflexiones personales y poemas.
Con un set de ocho canciones, nos hizo constatar su calidad con las palabras y las seis cuerdas. En gran parte del mismo, se acompañó de la voz de Romantictic (Rocío García), dando un toque más elegante y potente a la interpretación de las melodías.
Sonaron temas como Diente de León, Deja, La Casa En Tus Manos y El Perro Feroz, así como Sueño Despierto y Canción Esdrújula, estas últimas parte del proyecto de Romantictic. Después agradecieron al público, a Dani y dejaron la tarima. Tras una pausa escuchando indie rock y britpop, llegó el turno del acto principal.
Pasadas las nueve de la noche, Dani Bander y su grupo se hicieron presentes, con una gran felicidad que se les reflejaba en el rostro, los tres músicos tomaron sus instrumentos y de inmediato comenzaron los rasgueos.
La apertura se dio con Bienvenidos al Abismo, tema que también inaugura su nuevo álbum, una excelente forma de adelantarnos lo que estaremos escuchando y sintiendo durante su concierto. Aunque no dejó de lado el material ya conocido, pues continuó con Disculpe Usted, de su anterior producción Blackout (2019).
Para el tercer tema, Bander nos dio un viaje al estado de Michoacán con La Pirekua del Gato Negro, personalmente uno de mis favoritos del Melancoholismo. Siguió otro bloque de esta producción: Ojos Heridos, Wilson, inspirada en el popular balón de Náufrago, y Luces Que Se Apagan, en los que invitó a María Lee Del Pino a enriquecer las melodías con su cálida voz.
Tocó turno al tema que cierra el álbum, Canción Para Olvidar, con la que Dani aprovechó para agradecer al público, al conjunto formado por Carlos Fernández y Branch Ibrahim, al staff y terminó con un brindis para quienes estábamos esa noche. ¡Salud!
El bloque final nos consagró como melancohólicos, tomamos una paloma hecha de:
El agrio jugo de Carroñero, la cuál recordó la historia real de por qué la compuso y no es una historia de amor/desamor.
Una taza de refrescante y burbujeante Frontera.
Un caballito de tequila Somos 1 & Somos 2, también de su nuevo álbum.
Enfriar con hielos En El Camino.
Todo servido en un vaso escarchado con sal y dejando al público bastante a gusto y bien servido del regreso de Dani Bander a los escenarios. Deseando volver a verle pronto.
SETLIST
No se necesitó un conjunto numeroso ni un escenario aparatoso para disfrutar la presentación. Música en su más puro estilo, cargada de nostalgia, alegría, tristeza, melancolía e historias que salen de la sonrisa y carisma de Daniel, fueron suficientes para pasar una agradable noche, entre sorbos de nuestros vasos y bocados de quienes cenaban durante la presentación.
GALERÍA DE FOTOS
ANTHONY ESCANDÓN
DANI BANDER
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