Texto por: Araceli Ruiz Cabello (@infanta_ara)
Foros por: Mark Diablo (@markdiablo)
Papi Saicos llegó a México para ser parte del festival MonkeyBee como uno de los shows estelares y presentarse en el escenario con el styling que La Buena Hechura (LBH), diseñó para él; vestir la génesis del punk ha sido recordar sus principios, rebeldía e independencia.
César Castrillón, conocido como Papi Saicos, fundador de Los Saicos, sigue en activo, con fuerza y dispuesto a seguir explorando lo que es ser, sentir y vestir el punk.
En el estudio de La Buena Hechura, Aarón Jiménez trabajó de la mano de Papi Saicos un styling que mostrara un nuevo momento en una carrera ya legendaria, y mantuviera el aire rebelde desde una perspectiva elegante, misma que de ninguna forma está peleada con el punk.
Es importante mencionar que Papi Saicos contó al equipo de LBH que al inicio de su carrera Los Saicos vestían intuitivamente, siguiendo la moda del momento, buscando verse bien y sin una pretensión específica en cuanto al mensaje de su música trasladado a la ropa, se trataba de vestir como lo hacían los jóvenes para ir a una fiesta, con un aire elegante.
Comentó al equipo que esta primera experiencia de diseño de estilo para el escenario habla de cuidado e interés por su persona. Papi Saicos es un lienzo cargado de significado, y el diseño de styling para su presentación en México buscó responder a esto, pensar en el pasado, el presente y trabajar para el futuro.
Utilizando como base un pantalón y camisa en color negro, que recuerda el sobrio estilo de inicios de los años 60 y la crudeza del espíritu y canciones de Los Saicos, se creó un interesante contraste con un saco de patrón “seersucker” en color azul celeste con blanco que remite a la estridencia que podemos ver en la portada del EP Salvaje, en donde el color rosa es protagonista y fue inspiración para la propuesta del pasado sábado, día del festival MonkeyBee.
El contraste continuó subiendo hasta llegar a la cabeza con un sombrero de corte fedora en paja/toquilla, en color arena, que nos hace pensar en canciones como "Ana" y en armonías presentes en algunos momentos del trabajo del ya legendario grupo de origen peruano. La toquilla del sombrero en color negro es una sencilla combinación con la camisa y pantalón elegidos, que termina de cerrar el recorrido visual de todo el atuendo.
El sombrero tiene un mensaje detrás, habla de la madurez de una figura que ha superado la prueba del tiempo con su música, que es referente y llega a una nueva etapa de su vida, en la que el atuendo de Los Saicos y el posterior uso de la boina en los escenarios han quedado atrás, su fuerza y autoridad para hablar y ser parte de la historia de la música mundial viste de forma sofisticada.
Al preguntar sobre su forma de vestir en la vida diaria Papi Saicos nos dijo: Cuando voy por la calle, voy casual, cuando uno siente que va agradablemente vestido nunca le pone peros, se siente bien que la gente diga lo bien vestido que vas.
El escenario en el MonkeyBee arde a unos minutos de la actuación de Papi Saicos quien nos dice sobre quiénes fueron Los Saicos, “Era un grupo de jóvenes que hacían rock, yo siempre pensé que sería un músico de rock y luego me llevé la sorpresa de saber que lo que hacíamos era punk”.
Lo anterior nos recuerda que la contracultura se define y se redefine según el lugar, el tiempo y las circunstancias; ocurre que donde todo es velocidad y pasajero, la elegancia, el estilo y el cuidado son rebeldía; ya dice Aarón Jiménez, “vestir bien constituye hoy en día el verdadero acto de rebeldía”.
Araceli Ruiz Cabello, directora de contenido en La Buena Hechura
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