En la vieja tradición de acudir a festivales presenciales y dar detalles del mismo, tuvimos la oportunidad de asistir a la primera edición del Tecate Pa'l Norte Virtual, un esfuerzo por parte de Apodaca Group por regresarnos a ese mundo mágico de música, diversión y emoción.
Con una propuesta en la que la experiencia visual juega un papel muy importante para lograr la inmersión, el Pa'l Norte nos recibe con escenarios en CGI repletos de un eufórico público, muy a la Guitar Hero, para dar esa vibra de estar en medio del lugar.
Los artistas, en general, se involucran saludando al público, hablando de cierto modo con la audiencia, un detalle importante que cruza la delgada línea del video grabado y del concierto digital.
Así pues, demos un paseo por el Monterrey virtual para revisar lo que ocurrió en el Tecate Pa'l Norte 2021.
El anfitrión fue el standupero Franco Escamilla, a quien le esperaba una larga jornada con diferentes actividades dentro del festival en su propio escenario: Tecate Backstage. El cómico dio inicio con un monólogo en el que nos recordó todas las experiencias que vivimos a lo largo de estos casi 10 años del evento.
Después de 15 minutos en esta mezcla de melancolía y diversión, para quienes extrañamos los festivales presenciales, damos paso al primer músico en el escenario: Caloncho.
Al artista de origen venezolano nos recibió con Bésame Morenita, ambientando con romance y amor esta calurosa tarde de sábado. Su pop tropical se antoja para tener una bebida helada en mano y moverse al ritmo de la música.
Presentando a todo su crew, Caloncho nos lleva a momentos de baile con temas como Pasa el Tiempo, Brillo Mío y China Chula, una buena forma de calentar a la gente para lo que seguirá en estas siete horas de música.
Pero como en todo buen festival los horarios se empalman, así que tuvimos que despedirnos del escenario principal para correr al secundario, en donde Siddhartha abrió su show con Náufrago y Bacalar.
El multi instrumentista tapatío continuó con esas dosis de romance de su antecesor, su indie rock nos lleva por canciones como Tarde y Loco, así como el estreno en vivo de 80 Días y Brújula, su más reciente sencillo.
Rápido se pasó la primera hora del Pa'l Norte, dejamos el show de Siddhartha para correr a Milky Chance, dúo alemán de folk rock que tenía una cita pendiente con el público mexicano desde su cancelación en el Vive Latino 2020.
Dieron un repaso por varias de sus canciones más exitosas como Fallen, Right From Here, Fado, Cocoon, Flashed Junk Mind, Sweet Sun y más. Su actitud era emotiva, alegre, llamaban a la danza y a seguir con los buenos ánimos.
Entre bailes y sonrisas, Clemence Rehbein (guitarra/voz) ofreció algunas palabras al público, esperando que todos nos encontráramos en casa a salvo. Además, recordó con dicha su última presentación en el Plaza Condesa de la CDMX en 2018.
Antes de terminar su show, nos movimos a ver a uno de los favoritos del público: Enjambre; quienes se apoderaron del segundo escenario y de ahí no nos movimos hasta ver su set por completo.
Los oriundos de Zacatecas entraron directo a La Batalla y siguieron con Adormecido, de su más reciente álbum Próximos Prójimos (2020). Luego dieron paso a Intruso y Divergencia, se notaban las ganas de volver a tocar, la banda se vio cómoda en el escenario, entregando éxito tras éxito que bien han cosechado, no por nada tuvieron su fecha en el Palacio de los Deportes.
Enjambre se siguieron con temas de discos anteriores como Sábado Perpetuo, El Ordinario, Somos Ajenos y Por Esta Razón, dando uno de los actos más completos del día en cuanto a ritmos y sensaciones, mezclando nostalgia, energía, amor y desamor.
Para cerrar la tercia, corrimos al último escenario donde se encontraba Drake Bell, el cantante y actor nos recibió con una gran sonrisa y enfatizó su amor por México. Comenzó tocando Electric Churches y Leaves, haciendo bailar al público.
Ya antes habíamos visto a Bell con su set de rockabilly o en acústico, apoyado por talento nacional como su banda en vivo, pero en esta ocasión eligió una versión del lado electro-pop y del reggaetón, teniendo el soporte de un DJ y su guitarra eléctrica.
Se ganó al público con temas cantados en español como Diosa, Más Tiempo y Fuego Lento. También aprovechó para echarse unos solos de guitarra para Makes Me Happy y Down We Fall.
Ahora sí, terminamos la sección romántica y bailable para llegar al slam y los empujones, comenzando con Molotov.
La Molocha empezaron enérgicos con Noko, haciendo brincar al público de inmediato. Luego, nos llevaron a su lado rapero con Santo Niño y su cover de Amateur. El cuarteto encendió el escenario, literalmente, con temas como Here We Kum, Lagunas Mentales y Blame Me.
La segunda mitad del set de la maldita Molotov consistió en viejos éxitos, lo que nos mantuvo cantando, bailando y brincando hasta el final, canciones como Gimme Tha Power, Frijolero, Voto Latino, Changüich y Mátate Tete, sin dejar de lado sus versiones de Marciano, Rap Soda y Bohemia y Quem Pompó.
La participación de Molotov destacó por el buen sonido y por la fuerza de los temas que eligieron para esta noche, las animaciones de pirotecnia le daban un toque especial al concierto, algo que nunca les hemos visto en vivo y que mucho bien les haría.
Esta sección nos dejó bien prendidos para lo que venía, uno de los mejores shows en el plantea Tierra: The Hives.
Los suecos no dejaron descansar ni un segundo, abrieron pesado con los clásicos Come On y Main Offender. Es un hecho, son unos gigantes del rock, escenario que pisan es escenario que conquistan y en virtual no fue la excepción.
Intentando hablar en español, con buenos resultados, su vocalista Howlin Pelle puso al público y a la misma banda a brincar y cantar los siguientes temas, tal fue el caso de I'm Alive, Go Right Ahead y las muy coreadas Walk Idiot Walk y Two Timing Touch.
Antes de despedirse, The Hives reiteraron que volverán a México de manera presencial, pues aman tocar para nosotros, adoran a nuestro país y su gente, bueno y también los tacos. Los punks de traje cerraron al tope con Hate To Say I Told You So y Tick Tick Boom, en medio de explosiones por todo el lugar.
Un pequeño descanso antes de terminar y llegó el acto sorpresa del Tecate Pa'l Norte, se trata nada más y nada menos que de... ¡Belinda!
La actriz, cantante, conductora y hasta juez de concursos tomó los tres escenarios del festival al mismo tiempo, en donde cantó Muriendo Lento, Bella Traición y Amor a Primera Vista, canción que originalmente hiciera a dueto con Los Ángeles Azules, pero que aquí le dio un toque de rock para ofrecer algo distinto.
Así, la noche terminaba y tuvimos que decidir entre los tres últimos conciertos simultáneos, nos decidimos por cerrar tranquilos con el hip-hop de Gera Mx + Sabino, acertada decisión que nos llevó a una dupla de estilos muy diferentes.
Gera Mx va más a lo callejero, vivencias del artista independiente, de alguien que ha luchado por crecer y que está agradecido con la gente que siempre creyó en el; su set consistió de canciones como Panteones y Calacas, La Calle Sonríe, Nunca Sabrás Cuanto, Huracán, Independiente y Borracho Gacho.
Durante su presentación, Gera recordó al maestro Celso Piña con su canción Que Chula Mi Ciudad, en donde samplea al rebelde del acordeón. Antes de salir de nuestras pantallas, invitó a Sabino al escenario, juntos cantaron Maldito Romántico y así fue como se pasó la estafeta.
El creador del Sab-Hop arrancó su turno con este tema y con El Peorcito, canciones que denotan inconfundible voz y su estilo entre serio, meloso y sarcástico. Después continuó con Guapa!, Me Puse Pedo y terminó la noche con Conmigo Siempre.
Algo que destacó de la presentación de Sabino fue el uso de banda en vivo, no es solo un mc y un dj, es todo un ensamble que incluye guitarras, bajo, batería, teclados y tornamesa, por lo menos, cosa que enriquece su sonido y que ocupa a la perfección para dar énfasis al remate de sus rimas y su espectáculo en general.
Así vivimos el primer Tecate Pa'l Norte Virtual, es un hecho que vivir un festival en casa no va a compararse con estar en el estadio, el campo o dónde sea que armen su open air, pero da gusto que busquen alternativas para el entretenimiento a distancia.
La calidad del festival fue innegable, los sets bien grabados y en alta calidad, cuidando el sonido como siempre debería ser prioridad en este tipo de eventos.
El uso de escenarios renderizados, aunque bien hechos, llegó a ser un tanto excesivo en el sentido de que restaban atención a los artistas, incluso los paneos y encuadres de las cámaras tomaban más los exteriores que a las bandas y solistas.
Usaron sonido de público ficticio que, aunque suene a mala idea realmente no lo fue, daba esa nostálgica sensación de estar en un evento en vivo. Además, de que fue bien usado y ecualizado para no opacar la música en ningún momento.
Los artistas se mezclaron bien con la idea de estar en un festival, imaginando al público y dando un show como realmente darían en presencial, interactuando y yendo de un lado a otro, en especial bandas como The Hives, Molotov y Enjambre.
Tener a pocos artistas dio tiempo para dar sets completos de una hora, que con géneros tan diversos que hacía que pasearas de un escenario a otro. Aún así, se sintió una ausencia de headliners o de más actos en el line up.
El evento cumplió en calidad audiovisual, para un primer experimento considero que fue bien realizado. Falta curar alineaciones más atractivas y sólidas para que su catálogo musical no te deje sin nada que ver y pueda atraer a más público.
Ahora solo queda esperar a que podamos regresar a un Tecate Pa'l Norte presencial. Sabemos que aún falta para volver a como estábamos antes, pero sucederá. Nos vemos en la siguiente.
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